El futuro del marketing directo se llama email marketing.
Ignacio Martínez Mayoral
JULIO 18, 2001


¿Cómo comunicarme con miles de personas al mismo tiempo, con un mensaje distinto para cada una, en función de su perfil, que llegue rápidamente, obteniendo una medida de los resultados inmediata y de una forma más barata que cualquier otro medio?
 

Sólo un medio puede ofrecer esto: el correo electrónico, que aplicado al terreno del marketing llamamos e-mail marketing. Básicamente, el eMail Marketing comparte con el marketing directo tradicional los elementos clave. Así, es necesario elegir el público objetivo adecuado, enviar una oferta específica y medir los resultados, ajustando los puntos anteriores para la siguiente campaña.

El eMail marketing ha experimentado un explosivo crecimiento en Estados Unidos con un promedio de conversión del 4%, comparado al 1-2% del marketing directo tradicional, y ha emergido como una de las herramientas más poderosas disponibles para los anunciantes (fuente: Forrester Research). El crecimiento previsto de este mercado pasará de los 100 millones de dólares en 1999 a 2.9 billones de dólares en el 2005 (fuente: Lazard Freres & Co. LLC).


Un cliente, una oferta.

Hasta ahora, el Marketing Directo se limitaba a dirigir ofertas genéricas a un público objetivo demasiado amplio como para crear ofertas a medida del destinatario.

Con el eMail Marketing dirigiremos ofertas únicas y personalizadas en función de los datos que tengamos de los destinatarios. Por fin, el marketing one-to-one pasa de ser un concepto teórico y se hace realidad.


Una persona interesada es un futuro comprador.

El eMail marketing esta basado en el concepto de permission marketing, donde el destinatario de los mensajes ha dado su permiso para recibir información. Pero, ¿por qué es necesario obtener este permiso?

Enviar mensajes masivos suele ser realmente barato para el remitente (al menos económicamente), pero no para el destinatario. Para la mayoría de usuarios que acceden a Internet a través de módem, recibir un mensaje no solicitado sólo les hará perder tiempo y dinero.

Para el anunciante, enviar correo no solicitado (spam) puede causarle problemas con su proveedor de acceso a Internet, que limitará el número de envíos y, en algunos casos, podría bloquear las cuentas de correo. Pero, el argumento principal para no enviar correo no solicitado es que es una herramienta ineficaz, dado que los resultados que se obtienen y el riesgo que conlleva el envío hace no merecer el esfuerzo.

En Internet es mucho más productivo entablar relaciones con personas que quieren tu información y, así, integrar las necesidades de los usuarios con los servicios o productos que ofrece el anunciante. Después de todo, las personas que han mostrado interés por recibir información, dando permiso para recibir mensajes, son los más probables compradores.


Construir relaciones para incrementar las ventas.

La gran ventaja del uso del correo electrónico es la habilidad para construir relaciones con clientes, actuales o potenciales, empleados, accionistas y otros colectivos. Si se construye esta relación con un planteamiento a largo plazo, incrementar las ventas es sólo una consecuencia de lo anterior.


Invertir menos para ganar más.

Habitualmente, los costes de producción de las campañas de marketing directo a través de medios tradicionales, hacen inviable una comunicación continuada con los clientes, limitándose a un contado número de campañas.

El email marketing permite programar campañas continuamente, en función sólo de las necesidades de comunicación de la empresa, gracias a que los costes de producción, impresión, manipulados, franqueos, etc., desaparecen y sólo hay que concentrarse en el mensaje que dirigiremos a nuestro target.


Medición de resultados.

Una de las claves del éxito del marketing directo, en general, se debe a su capacidad de medir la respuesta de las campañas, y el marketing directo a través de correo electrónico no es diferente.

El anunciante puede medir la relación de hits, click-throughs, visitas a las páginas web, formularios cumplimentados, suscripciones a boletines y otros datos que darán una visión completa del resultado de la campaña. Se puede saber, incluso, no sólo la gente que ha mostrado un interés por la oferta sino que permite la posibilidad de utilizar la información para posteriores campañas. De este modo, puede enviarse un mensaje a quienes contestaron a una primera oferta y otro a quienes no lo hicieron, por ejemplo, y observar la respuesta de esta estrategia.

No hay duda de que email marketing está convirtiéndose rápidamente en una parte integral de la estrategia de marketing de muchas compañías con presencia en Internet. Si su empresa todavía no se ha planteado utilizar el email marketing como herramienta de comunicación dentro del marketing-mix, piense que, posiblemente, su competencia sí lo haya hecho.

 



Ignacio Martínez Mayoral
imartinez@es.buongiorno.com
es project manager de Buongiorno.com
* Artículo provisto por: Master Disseny